Aprovechando que hace unos pocos días se paseo por Harvard hablando de trastornos alimenticios y sus consecuencias, como oportuna que es, ahora su revista es acusada de discriminación (no es la primera), lo que es un dato no menor. Si, estamos hablando de ella. De la que decide QUE ES Y QUE NO-ES: Anna Wintour. Al parecer la editorial de Vogue USA se negó a promocionar a Gabourey Sidibe, la actriz de "Precious", por no corresponder con las tallas "normales". De hecho Gabourey es gorda y de color, algo que ya Vanity Fair había mostrado como un punto en contra a la hora de triunfar en Hollywood. Fue la mismísima VF quien excluyo a Sidibe de su tapa de principio de año, cuando junto a las que según el prestigioso magazine son las actrices del futuro de Hollywood. Y adivinen que: Si, son todas blancas. Y flacas. Y estadounidenses. Punto.
Haya sido o no Wintour, la cuestión es que obviar a alguien por su condición física en una revista que promueve el arte por sobre sus variables (la moda es arte) es algo tan estúpido e incongruente como el mundo en donde habitamos. Leo Vogue, tengo muchas en mi casa y sencillamente siempre mantuve la esperanza de ver a una Gabourey Sidibe en su portada, o siquiera en una nota. Yo la entiendo como la revista de moda mas grande del mundo (no descubro nada, obvio), como un lugar que rompe esquemas en cuanto a lo que hay que mostrar y lo que hay que ponerse. La moda es eso, actitud, estilo, mas allá de la talla. Chicos, las cosas están cambiando. Al menos eso se asoma, los prejuicios tienen sus adeptos es cierto, pero también tienen ya a sus detractores. Lo importante es no quedarse en el tiempo, mirar atrás para poder mirar ahora y hacia el futuro. Soy optimista, voy a soñar con ver en la ultima portada a alguna Gabourey Sidibe radiante.
George Blanco
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